octubre 10, 2024

Daniel Bergara: el uruguayo que creció en Rocha y cambió la historia en el fútbol inglés

Escribe Pablo Nuño Amoedo

Hay un antes y un después del uruguayo Daniel Alberto Bergara en su camino por el fútbol inglés. “Danny” hizo lo que nunca nadie había hecho. Antes que Bielsa o Guardiola, Bergara fue el primer extranjero en ser director técnico de un equipo de fútbol en todo el Reino Unido.

El pasado 6 de octubre, en el Edgeley Park, estadio del Stockport County, se izó nuevamente la bandera de Uruguay como en cada partido que ese equipo juega de local desde 2012. Su tribuna principal, The Danny Bergara Stand, con su tradicional techo inglés cobijó a algunos espectadores en lo que fue el comienzo de una nueva temporada de la National League de Inglaterra. Detrás de la bandera y del nombre de la tribuna se esconde la misma persona, el uruguayo Daniel “Danny” Bergara.

Bergara no solo es una leyenda del County por su labor como técnico. Fue el primer director técnico extranjero, de lengua materna no inglesa, en dirigir un equipo de fútbol en todo el Reino Unido. Ahí, en la cuna del fútbol, hay un solo antecedente de un extranjero (originario fuera de la isla) y es el sudafricano Peter Hauser que a mediados de los revoltosos años sesenta, jugó y a la vez dirigió al hoy desaparecido Chester City. Dirigir, lo que se dice únicamente dirigir lo hizo Bergara.

Nacido en 1942 en Montevideo y criado en los campos de Rocha, Bergara es un pionero absoluto en algo que hoy ya es un terreno conquistado por ilustres como Guardiola, Pellegrini, Pochettino o Bielsa. Su vida fue una verdadera excentricidad, un cuento jamás narrado por Fontanarrosa.

Con apenas 16 años debutó en la primera división del Racing Club de Montevideo. Bergara es un apellido con historia en ese club. Daniel Alberto es uno de los cinco hermanos que entre los años 50 y 60 jugaron en esa institución, dato inverosímil pero cierto. A veces de volante, a veces de delantero, Bergara siempre tuvo el gol como constante en su carrera de jugador.

n sus inicios era un habilidoso niño desparramando adultos con total desparpajo. Desde Europa lo viene a buscar el Mallorca español. Apenas tiene 19 años, y su madre no lo quiere dejar ir porque considera que todavía es muy joven para irse tan lejos. Otros tiempos. Aunque increíble, la solución llega cuando el club se compromete también en contratar a su hermano Ignacio, defensor y un par de años más grande que Daniel.

Llega a Europa en agosto de 1962 y en diciembre de ese año llega su primer gol, nada más y nada menos que al más grande, el Real Madrid. Al día de hoy es uno de los máximos goleadores en la historia del Mallorca, aún se encuentra entre los 20 primeros. En esa isla maravillosa, rodeada del azul Mediterráneo, conoce a su mujer de toda la vida, la inglesa Janet Tuner que cambiaría su vida. Para junio del 66, se casan en Inglaterra. Casualmente en ese momento se disputaba el mundial de fútbol que tendría como partido inaugural justamente al local enfrentando a Uruguay en el mítico campo de Wembley, y en la tribuna, a los recién casados.

Del Mallorca al Sevilla en una cifra récord para el momento donde no defrauda con goles y gambetas que también lo posicionan entre los máximos goleadores del club andaluz. Cinco años con la camiseta blanca y con 29 años pasa al Tenerife, pero la rodilla ya no es la misma. Bergara lo sabe y se retira joven. Poco menos de dos años después se mudó a St. Albans, Inglaterra donde comienza su otra vida.

Cerca de donde vivía, jugaba el Luton, un equipo importante del ascenso inglés. A través de un primo de su esposa llega al DT del equipo y le pide entrenarse con el plantel con el único interés de “estar en forma”. Obviamente que le dijeron que no. Pero entre esas idas y vueltas, el ahora “Danny” se hace amigo de Paddy Sowden, un ayudante del cuerpo técnico que le ofrece un lugar para ser entrenador de las formativas del club. Por cinco años guía a los jóvenes del Luton de manera innovadora, con entrenamientos diferentes a los que en ese momento se realizaban, poniendo énfasis en lo técnico, trabajando de otra manera en lo físico y con carisma, mucho carisma. Se abre camino en un terreno desconocido para los extranjeros. Así llega a un club importante, el Sheffield United, en donde a sus tareas con los juveniles se le suma el trabajo como ayudante técnico del primer equipo. En ese momento, otro extranjero, el argentino Alejandro Sabella era una de las figuras. La película de Bergara se pone cada vez mejor.

Año 1980, la llamada Dama de Hierro, Margaret Thatcher, recién está comenzando su larga estadía en el número 10 de Downing Street como primera ministra del Reino Unido. El DT de la selección de Inglaterra de ese momento, Ron Greenwood invita a Danny a formar parte del cuerpo técnico del seleccionado Sub 20 y Sub 18. De esa manera se convierte en el primer entrenador extranjero contratado para trabajar con ese seleccionado. Luego llegaron Sven-Göran Eriksson y Fabio Capello, pero ese es otro cuento. Bergara estuvo trabajando y aprendiendo unos años con el seleccionado, incluso formó parte de la delegación que fue al mundial sub 20 de 1981 en Australia en donde Inglaterra salió cuarto. Pero un día se fue Greenwod y él detrás.

De vuelta a Sheffield y con ganas de empezar de nuevo. Porque eso tienen los pioneros, no ceden a sus sueños, trascienden barreras que se creen infranqueables. Otra vez toma el mando de los juveniles y a la vez se convierte en ayudante técnico del DT Harry Haslam. El club era una vidriera importante y Danny quería dar el gran paso. El 4 de julio de 1988, a sus 46 años, se convirtió en el director técnico del Rochdale, un club ubicado en la zona norte del Gran Manchester que por ese entonces militaba en la cuarta división. De esta manera Bergara pasará a la historia como el primer extranjero en dirigir un equipo de fútbol en el Reino Unido.

Unos meses después la película da un giro a la altura de su extraordinaria vida. Por casualidad conoce a Brendan Elwood, un promisorio empresario de la zona que había comprado al clásico rival del Rochdale, el Stockport County. Elwood le ofrece un proyecto a largo plazo, desde cero, “a fresh start”.  Bergara dice sí cambiando la historia del County para siempre.

Stockport también se encuentra en la zona del Gran Manchester, pero al sur, más gris e industrial y con poco más de 100 mil habitantes. Hoy, algunos edificios recuerdan la pujante industria de otras (mejores) épocas. Stockport era el lugar por excelencia de la industria del sombrero, cuando el sombrero era un accesorio obligado. Por ese motivo a los hinchas del County les llaman The Hatters (Los Sombrereros).

Bergara comienza en marzo de 1989 perdiendo sus primeros 12 partidos seguidos, pero Elwood lo banca en su puesto y el tiempo le da la razón. La era Bergara duró 6 años dirigiendo por 319 partidos al County. Al momento de su retiro, era el técnico que más partidos lo había dirigido y el más ganador en sus más de cien años de historia. Stockport County nunca salió campeón con Bergara. Logró ascensos, peleó promociones y jugó finales de la Copa de la Liga en Wembley pero nunca ganó un título, con Bergara llegó la mística.

Este uruguayo es también el primer DT que no siendo del Reino Unido lleva a un equipo a una final en Wembley. 1992 y 1993, dos finales consecutivas en la catedral del fútbol, las únicas finales de la Copa de la Liga (denominado Autoglass Trophy por el sponsor del torneo) que disputó el County en su historia. A la primera final asistieron más de 50.000 personas en un hecho sin precedentes para un equipo del ascenso profundo de Inglaterra. Pierde 1 a 0 con el Stoke City. Al año siguiente el County la vuelve a disputar y pierde nuevamente, esta vez con el Port Vale por 2 a 1. En las imágenes del partido lo único que se escucha en todo el segundo tiempo es a una bulliciosa y orgullosa hinchada del Stockport County rendirle tributo a Daniel Bergara con un tema que se canta hasta el día de hoy: “Danny ´ s Bergara Blue and White Army” (El ejército azul y blanco de Danny Bergara). Porque para los hinchas, Bergara era el líder y sus jugadores los soldados que siempre daban batalla sin importar rival ni lugar.

De los jugadores que dirigió por esos años en el club surge la otra leyenda del County, Jim Gannon. El actual DT del Stockport, es el que más partidos lo dirigió y el más ganador. En la temporada 2018-2019 lo sacó campeón de la Conferencia Norte. Gannon, el alumno, superó al maestro Bergara.

En 1995, Elwood el tipo que lo había bancado siempre lo echa del equipo sin respetar el contrato firmado. Bergara le hace juicio que años después ganará, pero ya nada será lo mismo. Año 96, llega al Rotherham y nada pasa. En 1997 se va al Doncaster Rovers y todo sale mal. Después de 75 años, descienden a una división regional, con récord de partidos perdidos. De lo mejor de esa época es un documental invalorable que muestra toda la temporada: They Think It’s All Rovers. Año 98, toca Grantham Town que se encuentra en una división regional. Campaña de mitad de tabla y el fin de su carrera como DT.

Bergara no se quedó en la casa y siguió trabajando, siempre inquieto, con el fútbol entre ceja y ceja Su experiencia lo llevó a ser scout (buscador de jugadores) para grandes equipos como el Tottenham y el Sunderland. Pero en el Stockport County no se olvidaron de él y en 2004 Bergara ingresó en el Salón de la Fama del Stockport County como el DT más exitoso de la historia del club (en ese momento, después superado por Gannon). Dicen que los Hatters son hoy otro club gracias a él. En la ceremonia se recuerdan todos sus éxitos, sus récords, su capacidad dirigiendo, sus finales en la que fue su segunda casa, Wembley. Danny Bergara se transforma en una verdadera leyenda.

En octubre de 2007 lo que debería de haber sido un simple amistoso de pretemporada entre el Stockport County y Cardiff City en el Edgeley Park se convirtió en un partido que está en la memoria de todos los hinchas. El 25 de octubre, unos días antes del partido, había fallecido Bergara a los 65 años de edad. Momentos antes del encuentro se le rindió homenaje a su legado. El minuto de silencio inicial es estruendoso. Luego sus nietos entraron con la camiseta de Uruguay y dejaron arreglos florales en uno de los arcos frente a la tribuna Cheadle End donde la hinchada local no paró de cantar la canción “The Man From Uruguay”.

Tal fue la importancia que tuvo Danny Bergara en el Stockport County, que luego de su fallecimiento se rebautizó a la tribuna principal con su nombre, y cada vez que el equipo hace de local, puede verse la bandera uruguaya flameando en lo más alto, cómo forma de homenaje y agradecimiento. Esta semana, y luego de más de un año recaudando fondos, el Stockport County inauguró una estatua de Danny Bergara en el acceso principal al club.