diciembre 18, 2025

El Mosaico de la Costa Este

Escribe Juan M. Jara

Un viaje desde La Paloma hasta la Barra del Chuy

Recorrer la costa de Rocha es adentrarse en una geografía de contrastes. Lo que comienza como una infraestructura urbana consolidada en el sur, se transforma gradualmente en refugios de desconexión absoluta y pueblos de pescadores antes de culminar en la vibrante frontera binacional.

1. La Paloma: El corazón náutico y familiar

Es el balneario más grande y con mayor infraestructura del departamento. Su símbolo es el Faro del Cabo Santa María.

Tiene un perfil familiar y deportivo. Sus playas ofrecen desde la tranquilidad de La Aguada y Costa Azul hasta la bravura de La Balconada (famosa por sus puestas de sol) y Los Botes. Como novedad cuenta con el puerto más importante de la zona y un centro comercial activo todo el año.

2. La Pedrera: El balcón sobre el océano

Construido sobre un acantilado rocoso, es uno de los balnearios más exclusivos y estéticos de Uruguay.

Tiene un perfil Joven, bohemio y sofisticado. Sus playas,  El Desplayado (más familiar) y Playa del Barco (preferida por surfistas debido a su fuerte oleaje).

Sus Características, su rambla y su calle principal empedrada son el epicentro de una vibrante vida nocturna y gastronómica.

3. Cabo Polonio: La resistencia al tiempo

Ubicado dentro de un Parque Nacional, es un lugar único en el mundo donde no hay luz eléctrica ni agua corriente (salvo por sistemas sustentables).

Tiene un perfil desconexión total y ecoturismo. Su acceso es únicamente a través de camiones todoterreno autorizados que atraviesan las dunas.

Su atractivo es la mayor colonia de lobos marinos de la región y uno de los cielos nocturnos más limpios del continente.

4. Punta del Diablo: Entre la red y la tabla

Lo que nació como un pequeño pueblo de pescadores de tiburones se convirtió en el destino joven por excelencia.

Tiene un perfil rústico, artesanal y surfista. Sus playas: La Viuda (viento y dunas) y El Rivero, con la icónica postal de las barcas de pesca artesanales en la orilla.

Su atractivo la arquitectura espontánea de sus cabañas de madera de colores y el cercano Parque Nacional Santa Teresa, una reserva histórica y natural de 3.000 hectáreas.

5. La Coronilla: Naturaleza y conservación

Un balneario de playas extensas y paz absoluta, ideal para quienes buscan el retiro total del ruido urbano.

Tiene un perfil de avistamiento de fauna y descanso. Su atractivo es sede del proyecto Karumbé, dedicado a la protección de las tortugas marinas. Sus puentes colgantes sobre el Canal Andreoni son un paseo clásico.

6. Barra del Chuy: El abrazo del agua

Es el último balneario de la costa uruguaya antes de llegar a Brasil, separado del país vecino por el arroyo Chuy.

Tiene un perfil popular y transfronterizo. Sus playas, kilómetros de arenas blancas y mar abierto, muy buscadas por quienes practican la pesca deportiva.

Su ventaja, su cercanía con la ciudad de Chuy permite combinar el turismo de playa con las compras en los free shops y el intercambio cultural binacional.