diciembre 4, 2024

Sigue la polémica por el adoquinado en Punta del Diablo. Vecinos presentaron denuncia en la Institución Nacional de Derechos Humanos

El adoquinado comenzó a realizarse en la faja de defensa de costa sin Evaluación de Impacto Ambiental y colectivos alertan que podría “beneficiar a particulares en detrimento del interés general”; el Ministerio de Ambiente avisó a la comuna que debe presentar un proyecto y necesita su autorización.

En un comunicado que compartieron con la diaria, el Colectivo Ambiente señala que el proyecto adoquinado no tuvo consulta ciudadana ni un Estudio de Impacto Ambiental que evalúe sus consecuencias, pese a que se encuentra en la faja de defensa de costa. También sostiene que genera “incertidumbre por su posible contribución a la erosión costera y la agudización de los problemas de saneamiento que ya afectan a la zona”, recordando que “la Playa de los Pescadores es una de las áreas más visitadas del balneario” y que “depende del turismo y de la pesca artesanal”, por lo que “cualquier alteración en su estructura natural tiene el potencial de afectar tanto el ecosistema como la economía local”. Asimismo, en el comunicado, el colectivo expresa que la obra podría “beneficiar a particulares en detrimento del interés general”.

El 12 de noviembre comenzaron las obras. Locatarios autoconvocados se reunieron en el sitio previsto y algunos intentaron —sin éxito— detener las máquinas. El 19 de noviembre enviaron una denuncia a la Institución Nacional de Derechos Humanos y la compartieron con la diaria. El miércoles 27 de noviembre recibieron una respuesta: el Consejo Directivo determinará qué tipo de acciones llevará adelante. En paralelo, están evaluando ir por el camino legal solicitando, por ejemplo, una medida cautelar de no innovar con el objetivo de frenar el adoquinado. Mientras tanto, la obra avanza.

El ex intendente de Rocha, Alejo Umpiérrez, manifestó que el adoquinado es “una mejora para el balneario” y sirve para “jerarquizarlo, cotizarlo mejor, para que quede más lindo estéticamente, pero —además— para que esté mejor ambientalmente”. “Es un desastre lo que tenemos al día de hoy: una calle, en una pendiente que es de tosca, que se recarga todos los años con 400 m3 de tosca que va a parar a la playa cada vez que la lluvia actúa, erosionando toda la calle, causando el zanjado y el aspecto horripilante que uno le ve”, agregó.

Al ser consultado sobre si la iniciativa contaba con autorización del Ministerio de Ambiente por tratarse de una obra en la faja de defensa de costas, el jerarca fue tajante: “Nosotros comunicamos la obra al Ministerio de Ambiente. Comunicamos, no pedimos autorización, porque ya hemos actuado en la faja costera”, afirmó.

Fuentes confiables aseguran que la mayoría de los residentes de Punta del Diablo están de acuerdo con esta obra, y una minoría en contra, pero son estos los que hacen “ruido”, porque tienen todo el tiempo del mundo, son los que se colocan delante de las máquinas, los que salen a la prensa nacional, siguiendo los pasos de otros “todólogos” que en su momento se opusieron al puerto maderero de La Paloma, al alumbrado de Valizas, al enrocado de Costa Azul, y de aquellos que ya se están oponiendo a la instalación de un puerto espacial en La Esmeralda.